La villa de Porriño celebró sus cien años de fidelidad adorando a la Eucaristía, con una vigilia de oración presidida por el obispo de Tui-Vigo, Mons. Luis Quinteiro, el pasado sábado 10 de septiembre, a las 20 horas. A la celebración asistieron también representantes del consejo nacional y otras secciones de la ANE, que acompañaron la procesión de banderas desde la capilla de San Benito hasta el templo parroquial de Santa María.
«En un día como hoy, lo primero que tenemos que hacer es agradecer al señor que nos haya dejado en la Eucaristía, que él se haya quedado con nosotros en la Eucaristía», expresó Mons. Luis Quinteiro tras la lectura del Evangelio y, en este sentido, añadió que «sin la Eucaristía nosotros no seríamos cristianos. Sin eucaristía nuestra fe no sería posible». Mons. Luis Quinteiro también agradeció la presencia de la ANE en la diócesis de Tui-Vigo y exhortó a todos los adoradores allí presentes a una nueva conversión, que contribuya a dar un testimonio vivo del a Eucaristía, de la caridad, porque «la Eucaristía es el futuro de la Iglesia, como lo ha sido siempre desde el comienzo».
Durante la celebración, se entregaron las insignias correspondientes a una veintena de adoradores: 12 adoradores activos —aquellos que han participado en tres vigilias continuadas o cinco salteadas—, 3 veteranos —aquellos que han asistido a más de 125 vigilias—, 8 los veteranos constantes —aquellos que suman más de 250 vigilias— y 2 veteranos constantes de asistencia ejemplar —que cuentan con más de 500 vigilias—.
En la actualidad, la sección de la Adoración Nocturna de Porriño cuenta con cerca de 30 adoradores que, acompañando al Jesús Eucaristía, sienten «una alegría desbordante de esa intimidad con el Señor», tal y como expresaba Cándido Lago, presidente de la ANE de Porriño, en el programa diocesano de Iglesia Noticia Tui-Vigo.
Nacimiento de la ANE de Porriño
La devoción a Jesús sacramentado en la villa de Porriño está presente desde 1674, con la creación de la Hermandad y Cofradía del Santísimo Sacramento, fundada por el capitán Antonio de Lemos, vecino de la ciudad de Sevilla y natural de Porriño, junto a los vecinos de la localidad y otros devotos. No será hasta 1922, cuando se funde la ANE en la comunidad parroquial de Porriño.
Según precisa Jesús María Fernández Rodríguez en su obra Historia de la parroquia de la Inmaculada Concepción de Santa María de Porriño, «la noche del 11 al 12 de septiembre, en una solemne vigilia presidida por el obispo Manuel Lago González y, con la asistencia de las secciones de Tui, Vigo, San Pelayo de Navia y Bouzas, se inauguró nuestra sección adoradora con un grupo de 22 porriñeses».
