Medio centenar de personas de diferentes nacionalidades —españoles, senegaleses, peruanos o indonesios, entre otros— vinculadas con la actividad del mar participaron en el torneo navideño de fútbol sala que la delegación diocesana de Stella Maris organizó el domingo 18 de diciembre de 2022, para que conectar a los marineros con los diferentes agentes del puerto de Vigo. Entre partido y partido, la banda de música Argonat Band amenizó la mañana y el grupo de gimnasia rítmica del colegio Apóstol Santiago cerró la jornada con una pequeña exhibición.
La actividad arrancó con el «saque de honor» a cargo de Carlos Botana, jefe del departamento de sostenibilidad de la Autoridad Portuaria de Vigo, quien destacó la labor de Stella Maris como «voz de los marineros en el puerto para poder transmitir sus problemas y necesidades a las administraciones». A partir de ese momento, comenzaron los partidos entre los seis equipos formados por personas de diferentes nacionalidades y profesiones vinculadas con la actividad del puerto vigués como Diego González, policía portuario, para quien la actividad «es una convivencia y lo importante es que se visibilice los problemas que existen».
Elvira Larriba, directora de Stella Maris en Vigo, explica que «nos pareció una buena idea organizar este torneo amistoso de fútbol para hacer un poco de comunidad» entre los trabajadores del puerto de Vigo y los tripulantes de la flota de altura que, de noviembre a enero, permanecen en la ciudad olívica lejos de sus familias. En este sentido, desde Stella Maris «lo que queremos es que se sientan integrados, que, cuando lleguen a Vigo, se encuentren con un puerto amigable, en el que se organizan actividades pensando en ellos».
Al finalizar la mañana, tras la pequeña exhibición de gimnasia rítmica del equipo del colegio Apóstol Santiago, cuyas entrenadoras, Laura y Sofía, han explicado que las niñas «siempre tienen ganas de colaborar y, sobre todo, les encanta actuar», el presidente de la Autoridad Portuaria, Jesús V. Almuiña, entregó los diferentes premios a los equipos ganadores, aunque todos recibieron una medalla de Stella Maris como recuerdo del ocio compartido. El presidente del puerto expresó que se trata de una iniciativa que conseguido integrar a personas de culturas completamente dispares a través de una jornada deportiva en la que «lo importante es que ellos hayan pasado una mañana agradable, conociéndose».
El desarrollo de esta actividad ha sido posible gracias al equipo de colaboradores de Stella Maris en Vigo que, voluntariamente, ponen su tiempo a disposición de las gentes del mar. Izaskun Molinero, voluntaria del apostolado del mar que ha colaborado en esta actividad, explica que «hay personas que viene totalmente desarraigada y que no tiene ni a su familia ni su vida aquí y están a bordo de un barco. Para mí es la satisfacción de poner un puntito de apoyo». Como ella, Juan Bande, director de Argonat Band, comenta que «nos gusta ser solidarios y hay que amenizar cualquier evento. La música une fronteras, hace amistades y, además, en estas fechas que es bueno que haya felicidad, paz y buena música».
Españoles, senegaleses, peruanos o indonesios han participado en esta jornada deportiva para conocerse y, sobre todo, disfrutar de un poco de la fraternidad humana en uno de los momentos más especiales del año, como es la Navidad. Así, tal y como explica Elvira Larriba, «Stella Maris lo que pretende es aliviar el impacto negativo» derivada de la propia actividad del mar durante estas fechas navideñas que muchos pasarán alejados de sus familias y amigos.
