3 de julio de 2024

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Santo Tomás
3 de julio de 2024

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Santo Tomás

El efecto ser humano

El efecto ser humano

Campaña «Contra el hambre» de Manos Unidas 2024

Desde hace más de 65 años, en el mes de febrero, Manos Unidas convoca la campaña «Contra el hambre», para ayudarnos a tomar conciencia de la desigualdad que existe en el mundo y, así, tratar de erradicar la pobreza, el hambre y la miseria, creando un planeta en el que se respeten los derechos humanos. Gracias a esta campaña, en el año 2022, Manos Unidas ha apoyado a cerca de 2 millones de personas, en países de África, América y Asia.

En el año 2024, la organización de la Iglesia en España para la cooperación al desarrollo pone el foco en el cambio climático y, en concreto, en cómo la desigualdad medioambiental afecta a millones de personas, sobre todo, del sur global, mermando sus necesidades básicas. Manos Unidas nos invita a despertar los sentidos y comprometernos en el cuidado de la casa común para que todos los seres humanos podamos vivir con dignidad, fortaleciendo «la conciencia de que somos una sola familia humana» —tal y como expresa el papa Francisco en la Laudato Si—.

Recordemos las palabras del salmista: «del Señor es la tierra y cuanto contiene»; una tierra que nos ha entregado para cultivar, dar fruto y ser fecunda… En definitiva, el Señor nos llama a ser coparticipes de la obra creadora, custodios de la Tierra, en la que todos los seres humanos —como esa gran familia que sueña el Santo Padre— podamos vivir con dignidad, creciendo en amor al prójimo.

Hoy, el problema de nuestro mundo es un problema de solidaridad. Podemos tener la tentación de vivir al margen de lo que sucede, de dormirnos ante esta realidad de pobreza. Pero si abrimos los ojos, nos daremos cuenta de que, en nuestras calles, en nuestros entornos cercanos, encontramos cientos de rostros que se ven afectadas por la desigualdad medioambiental. Con el lema «El efecto ser humano», Manos Unidas pone de manifiesto que el hombre es el único capaz de revertir esta situación de desigualdad, que él mismo ha propiciado.

Cada uno de nosotros, con un gesto —aunque sea pequeño—, tenemos la oportunidad de cambiar la situación. Podemos, por ejemplo, prevenir la mortalidad humana por inundaciones, sequías y tormentas que, entre 2010 y 2020, fue 15 veces mayor en las regiones altamente vulnerables, en comparación con las regiones de muy baja vulnerabilidad; o tratar de garantizar el acceso a la electricidad que, hoy por hoy, no llega a 733 millones de personas del planeta.

Jesús nos recuerda en el Evangelio que Dios no se olvida de su creación. Sin embargo, quiere contar con nosotros para sanar esta Tierra que, como diría san Pablo, «gime y sufre dolores de parto».  Con esta campaña «Contra el hambre», Manos Unidas nos ofrece una oportunidad para sumarnos al cambio, porque el «efecto ser humano» puede destruir, pero también puede reconstruir la casa común en la que estamos llamados a coexistir toda la humanidad.

Con mi afecto y oración.

 

+ Luis Quinteiro Fiuza,

obispo de Tui-Vigo